Inés Ballesteros - Psicóloga en Tenerife

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La Dependencia Emocional : mendigando el amor negado.

Erase una vez…

En Dependencia Emocional (I), hice una aproximación acerca de el desarrollo de la dependencia emocional y el tipo de funcionamiento personal que lleva aparejado.

Lejos de hacer un boceto de una persona egoísta, manipuladora, absorbente y celosa me gustaría hablar de las personas dependientes emocionales como personas con grandes carencias, altas dosis de sufrimiento y excesiva necesidad de aprobación que desde su niñez aprendieron a sobrevivir a base de hacerse indispensables a los demás para intentar llenar así su propio vacío.

En la biografía de una persona con dependencia emocional suelen encontrarse historias que hablan de falta de amor, o de un amor inadecuado de las principales figuras de referencia (padre, madre, cuidador, etc.), que genera un sentimiento de no haber sido amado adecuadamente. Durante la infancia probablemente hayan estado expuestos a situaciones donde el chantaje emocional, la manipulación, la culpabilización eran usadas para conseguir por su parte un comportamiento indispensable cuya ganancia última sería obtener la aprobación, el reconocimiento etc.

Biografia-dependiente-emocionalSi partimos de que el amor y el afecto de quienes nos rodean en la niñez es la principal fuente de nutrición (junto con los alimentos por supuesto) del YO (quienes somos), podemos entender que la falta del mismo genera el sentimiento de» no ser lo suficientemente  válido para ser amado». Con esta carga emocional las consecuencias son la construcción de una autoestima deficitaria durante el proceso de desarrollo, que se puede acrecentar en la medida en que vamos creciendo.

Nuestra autoestima también se forja en otros contextos que no son el familiar, entre ellos destaco el escolar y el laboral, por lo que si en estos contextos se repite la misma experiencia por parte de profesores, compañeros, etc., no hace sino confirmar el sentimiento de «minusvalía«, por lo que la persona va asumiendo para si misma el rol de «segundo plano».

La mente, que es sabía, el corazón que es intuitivo y el cuerpo que es la expresión en forma y tiempo un día se alinean y por azar probablemente, se dan cuenta que a través de la satisfacción de las necesidades de los demás se consigue el reconocimiento, la aprobación, la aceptación y en definitiva el amor , sin embargo el coste que se termina pagando es tan alto como renunciar a uno mismo.

Una carrera a ninguna parte.

Aquí empieza una maratoniana carrera que sale del «vacío afectivo» hacia la meta del «amor incondicional», una carrera que a pesar de estar llena de obstáculos, nada parece frenar a la persona con dependencia emocional que ya ha aprendido la necesidad del sacrificio, entendiendo que nada es tan doloroso como su falta de amor, por lo que «el fin justifica los medios».

greece-998496_640El dependiente emocional se lanza a la carrera, con una visión distorsionada del recorrido, con un equipamiento inapropiado y escasas provisiones para subsistir dignamente, visto así es un acto suicida, pero es que realmente tiene que «matar» a quien es  y convertirse en quien quieren que sea para poder conseguir su logro.

Las estrategias de un dependiente emocional para su subsistencia y consecución de sus objetivos son variadas, a veces imperceptibles, y se encadenan unas con otras,  entre ellas encontramos: la justificación, la minimización, la negación de necesidades, la priorización de los demás, la aparente sumisión, la manipulación, gran parte de ellas aprendidas de maestros que tuvieron en sus vidas.

A modo de ejemplo un dependiente emocional justifica un acto de menosprecio hacía una opinión suya , haciendo ver que el otro tiene razón, minimiza el daño que sufre, da pena a quién le ha dañado asume la culpa de la situación  y termina por  negarse el derecho a reivindicar su criterio porque «quién es para tener criterio», un ejemplo burdo pero cotidiano.

La Dependencia Emocional nos ciega.

Lo peor o lo mejor de todo, depende como se mire ,es la ausencia de conciencia de que este esquema está en la base del funcionamiento de la persona, no se ha dado cuenta de sus trampas, y aunque reconoce sus carencias, no identifica la relación entre estas y su comportamiento.

ojo-puertaUn dependiente emocional se hipoteca a si mismo para dar la otra persona todo lo que es, pero normalmente terminan por ser abandonados, dejados, por ser excesivamente posesivos, celosos, inseguros,controladores…

A los dependientes emocionales «les sangra el corazón y les escuece el alma « en las rupturas o en las separaciones que se llevan a término por la decisión de la otra persona, ya que son vividas como el cumplimiento de la mayor fantasía catastrófica, como una profecía auto cumplida que reza «nadie te va a querer, no lo mereces».

Quienes han estado unidos afectivamente a un dependiente emocional acaban extenuados, saturados, cansados, desgastados, pero lo triste es que se alejan cuando más vulnerables y necesitados están, , cuando más en carne viva muestran su herida, y sinceramente creo que las responsabilidades en pareja son cosa de dos.

Más vale viejo conocido…

dependencia emocionalCuando estamos mal, tanto física como emocionalmente, nos da seguridad rescatar aquello que en el pasado nos sirvió para pasar a un estado mejor, que no significa que fuera lo idóneo, pero ayudó.

Por ejemplo ante una discusión, antes de ir a mayores si tengo poco tiempo, probablemente termino por ceder aunque lo ideal es que continuara hasta realmente aclarar puntos de vista.

Con esto quiero decir que cuando un dependiente emocional hace un despliegue de comportamientos, celosos, manipuladores, etc, quizá es que está en contacto con su fantasía catastrófica  y no conoce herramienta mejor para salir de esa situación, por lo que saca su artillera pesada,sin valorar que  a larga sea peor.

De esta manera  crea una «fantasía de control» que necesita para alejar la confirmación de la profecía auto cumplida de la que hablé antes, y claro todos sabemos como quedan las cosas cuando la artillería pasa por ellas…

¿Y entonces que papel juegan los demás?.

Qué hacer.

Si conseguimos «traducir» esos comportamientos tan histriónicos y viscerales en los verdaderos mensajes que los subyacen, quizás nos resulte más fácil acompañar a un dependiente emocional en su proceso de cambio.

Entender que cuando los celos son en extremo, son un síntoma del temor a no ser elegido, que la exigencia de exclusividad responde al temor a ser menos que los demás, que cuando culpabilizan buscan sentimientos que unan desde la pena, eso nos permite ver la esencia de la persona dañada, manipulada, abandonada…

dependencia emocionalNo es necesario estudiar psicología para abordar estas cuestiones, es más una cuestión de compromiso con el ser amado, de ayudarle a que sea consiente de lo que le pasa soltando los juicios y la carga, esa es la mejor manera de demostrarle la incondicionalidad que necesita.

En mi consulta de psicóloga he visto las dos caras de la moneda de la dependencia emocional, y ambas sufren y se desgastan y se culpan y se dañan, sin embargo cuando durante la terapia se empieza a tomar conciencia de lo que pasa, se re-conocen en quienes realmente son, se re-conquistan con grandes dosis de aceptación y por supuesto de trabajo.

Sobre este tema hay muchas cosas que se pueden añadir, así que una vez más les invito a compartir, preguntar, opinar porque este es un espacio para quienes quieran estar en él.